Venda en los ojos

   Aunque sea reiterativo y peque de pesado, también nosotros, al ver tan cerca la miseria y la pobreza y tan lejos la supuesta recuperación…nuestro corazón tiembla, nos sentirnos más que ansiosos, desesperados, afligidos…etc. Ahora bien, se impone una pregunta: Una sociedad que no tiene conciencia de la existencia de grandes focos de pobreza y de exclusión social, ¿puede socorrer a nadie? ¿Puede ser ayudada?, por desgracia todos conocemos mucha gente que sufre y su situación es desesperada, cada vez es más frecuente, pero su drama es que no siempre son conscientes de su situación personal, algunos no han asumido su situación de extrema pobreza, No obstante, también nosotros debemos de sensibilizarnos, motivarnos aún más, hacernos soldados de esta causa. Es necesario, pues, que seamos capaces de pedir ayuda, en nuestro nombre y en el de los demás, a la par de ayudar, solo así se lograra que esa ayuda sea efectiva. Aunque queremos cambiar la conciencia de todos, en este particular, solos no lo lograremos nunca, se necesita ayuda, “un grano no hace granero, pero…” Alguien se preguntará: ¿por qué es tan importante desear cambiar de actitud? Sencillamente porque, de lo contrario, seguiremos sin poder dar solución a la exclusión, sin movernos de sitio, en todo caso caminando hacia atrás, hacia tiempos y situaciones del pasado y el problema se ira agravando hasta llegar a límites insospechados. Una sociedad sin conciencia, está abocada a su propia autodestrucción, difícilmente sentirá deseos o necesidad de compartir, de buscar fórmulas de cooperación. Por eso, cuando llega el momento de ponerse manos a la obra, el momento del compromiso real, primero ,es preciso olvidar el bienestar del pasado, comenzar desde este punto de partida actual, deshacernos de esos supuestos escrúpulos y del complejo de superioridad, de la soberbia, estas son lacras que infectan nuestro pensamiento y nos limitan gravemente y ver hacia donde caminamos. No debemos ni si quiera de dudarlo: pedir ayuda es una gran decisión, a veces vergonzante, porque es el momento en que se nos cae la venda de los ojos y se ve la realidad que nos rodea, como dice el refrán “No hay más ciego que el que no quiere ver”.

Cara y cruz

   La vida, al igual que las monedas, tiene dos lados y un canto, ella nos presenta ante nosotros un nuevo contraste entre el bien y el mal, (nuestra cara o cruz), la rutina diaria, así observada detenidamente con respecto a cualquier otra faceta, no es tan simple ni parece tan ordinaria, como no lo es la vida real que forjamos cada día. La vida y su desarrollo nos enseñan que hay buenas intenciones que provienen de buenas personas, pero que estas intenciones degeneran y acaban siendo lo contrario de lo que se pretendía, y que, al revés, hay malas intenciones que por azar, por pura casualidad y sin pretenderlo cambian y acaban haciendo el bien. ¿Qué significa esto?, Significa que el que busca hacer el bien lo encuentra, en la medida en que no decaiga en su intento, y no reparara en nada para lograrlo, aunque tenga que hacer el mal en su intento…no cede bajo ninguna presión o amenaza, y, si acaso llega a desistir, lo hace ante el puro agotamiento y la soledad que tiene al proceder así.  No debe caer en la incitación del desánimo o de asustarse ante exigencias o intransigencias externas, si no se puede, pues se reconoce la debilidad, la falta de motivación o falta de apoyo hacia su causa, no se debe arrepentir, cargarse las pilas con una nueva ilusión en el corazón y... volverlo a intentar. Y a la segunda, a la tercera…etc. lo logra, entre otras razones, porque sabe que con persistencia, paciencia y cargado de buenas razones…todos los argumentos que pudiesen existir en su contra, se desvanecen se caen por su propio peso… y porque, conociendo a los demás, sabe, no sólo por experiencia individual, sino también por experiencia colectiva, que sólo lo que es bueno perdurara ya que es reconocido como bien común por todos y no solo por un puñado de aprovechados. Por el contrario el individuo que busca hacer lo incorrecto, lo hace sin temor, en su propio beneficio, aprovechándose de las circunstancias adversas de los demás, de su desdicha, busca exprimir hasta la última gota, y aun así no le es suficiente, pero en raras veces, ocurre que entre sus objetivos de obtención de beneficios, salen beneficiados terceros, y resulta que él no contaba con ello, pues es egoísta por naturaleza . Por tanto, no por que haya ocasionado un bien (indeseado) puede ser llamado bienhechor, aunque aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, se vanagloria del bien que ha hecho para ganar buena fama, ya se sabe “Cría fama y échate a dormir”, pero en sus entrañas maldice el momento en el que tomo esa decisión, pues solo disfruta viendo el sufrimiento y penurias que ocasiona y obteniendo de este dolor, el beneficio para él solo.

¿Somos capaces de ser iguales?

   Vista desde la perspectiva de la discapacidad como un "fenómeno" social, existe un ideal grande y difícil como es, sin duda, la integración social, la plena igualdad de las personas con discapacidad, si contribuimos con una actitud positiva, aunque esto solo sea un granito de arena, todos los hombres y mujeres con discapacidad,  tendremos el camino prácticamente andado, no se deben de tolerar ofensas comparativas, esto es un acto odioso por sí mismo, las personas con discapacidad estamos sistemáticamente condenadas a la exclusión y a la marginación en nuestra sociedad actual, aunque no lo comprendemos, se tolera, nosotros si tenemos un corazón tan grande donde caben todos, también sabemos lo que es la pobreza, la marginación; pero si no luchamos contra ellas, unidos, todos de la mano, nos vencerán, tampoco  se trata de enfrentarnos con alguien en particular, son actitudes que viven en la mente de personas que no comprenden, ni quieren… que todos tenemos iguales derechos,  en otros tiempos se nos había marginado por la falta de normalidad, pero la discapacidad es lo más normal del mundo, de hecho, todos nacemos dependientes y en el final de nuestra vida volveremos a serlo, contando con que el desarrollo de esta no venga acompañado de una discapacidad sobrevenida y entonces lo seremos antes, esta es la regla de oro de la condición humana. Queremos y deseamos no tener que denunciar estas actitudes negativas y que los demás nos comprendan también, no somos una carga, ni una pérdida de tiempo o robavidas… somos personas con la misma dignidad y características que cualquiera, las personas con discapacidad hemos sido expropiadas de nuestra individualidad y de la normalidad y, a partir de ahí, relegadas a los márgenes de la exclusión y la marginación social, pero nosotros nos resistimos a ello, nos cuesta pedir auxilio, pero se pide, perdón cuando haya la necesidad de hacerlo; pero que nos lo nieguen… nos cuesta más, no tenemos margen de error por aquello de la minusvalía… pues se da por hecho que valemos menos, que somos diferentes, anormales…Si fuéramos así de veras, ¿sería tan difícil de aceptarnos?, seguramente estaríamos actuando en circos, como “monstruos de feria…" Pero tenemos la autoestima alta, estamos capacitados para hacer cualquier trabajo, cada uno dentro de sus limitaciones, nos resultara, quizá, más trabajoso pero a la vez más provechoso. Por eso podemos establecer la siguiente afirmación: “a mayor dificultad, mayor empeño en lograrlo; a mayor integración, menor pobreza”, esto dará una pista para conocer nuestro grado de humildad. Además, que las personas con discapacidad nos hemos preparado muy bien en los pasados años de bonanza, hemos contribuido a crear riqueza en este país, poco a poco vamos creando conciencia de integración en la sociedad, cierto que aún hay marginación, pero esas ofensas y comparativas van en retroceso..Tal marginación ha sido una constante para las personas con discapacidad desde la Antigüedad hasta nuestros días. La impronta de la doble marginación nos ha ubicado siempre a las personas con discapacidad en los estamentos inferiores de la sociedad, sin otro horizonte que la dependencia y  por tanto, del sometimiento a nuestro entorno...y esa actitud ha de cambiar, mimando a los niños/as con discapacidad, proporcionándoles la atención y recursos que precisen...para hacer de ellos/as personas plenamente integradas e independientes, con un futuro que tenga las mismas oportunidades que los demás, que cuenten los méritos, la preparación, la capacitación, que a fin de cuentas, será, lo que marcara la diferencia de poder ser o lo contrario, el futuro lo escribimos hoy y si hoy hay cimientos de integración, en el, habrá esa igualdad.

¿somos lo que decidimos ser?

  La vida se nos escurre entre los dedos de la mano rápidamente, se vive deprisa y sin reflexionar, vivimos el presente, sin tomar en consideración el pasado y sin pensar en el mañana, somos pues el fruto de decisiones pasadas, unas serian correctas y otras serian erradas…de cualquier forma, nada se puede cambiar en el momento presente. El pasado es como un suspiro que se cierne sobre nosotros y nos acompañara durante el resto de nuestra vida, viene y va, como un bumerán, unas veces nos trae buenos recuerdos, otras nos trae momentos duros, amargos y dolorosos. En el pasado habitan nuestros recuerdos como una sombra de lo que fue, viven en él nuestros sueños, nuestros primeros amores, nuestras primeras decepciones…etc. Siendo sinceros hay reconocer que es como una voz en nuestra conciencia, que influye en nuestro día a día mucho más de lo que desearíamos, para lo bueno y para lo malo; esa voz es capaz de recordarnos las injusticias que hemos provocado o causado, aquellas palabras que hirieron a alguien, dichas con malicia y desprecio, con soberbia, aquellas actos que hicieron mucho daño y se hicieron solo por el placer de herir... por ello nuestros recuerdos nos manifiestan que no somos perfectos, nos invitan a no repetir los mismos errores, a no seguir el mismo guion, el mismo camino que nos llevo a un lugar no deseado. Pero, por el contrario, no debemos de negarnos aquello que nos recuerda lo bueno, lo agradable o el bien que hicimos... Conservar nuestra inocencia inmaculada, esta que solo se posee en la infancia, recordarla en positivo. Ser también valiente y decidido para pedir perdón y a la vez perdonar a quienes (tal vez sin querer) nos hicieron pasar por situaciones embarazosas  e innecesarias. Quizás el secreto de la grandeza está en tener la conciencia limpia... Toda nuestra infancia y juventud estuvo marcada por el ansia del cambio, de querer comerse el mundo, de innovar, de emprender senderos nuevos por donde nadie hubiese caminado, de descubrir un lugar nuevo y triunfar en él… pero el despertar en este ingrato mundo, se impuso a los sueños y al final, ese mundo nos comió a nosotros…se derrumbaron los sueños de grandeza, se derrumbaron los cimientos de nuestra fantasía, dando paso a la cruda realidad, no estábamos preparados para un lugar tan duro y competitivo, ni teníamos conciencia que fuese así. No se si al final podríamos responder a esta pregunta ¿lo hemos logrado? Seguramente no.., es altamente probable de que ninguno haya cumplido sus sueños, más todos nosotros, hemos elegido nuestro camino, sin darnos cuenta siquiera de ello, en un ambiente, quizá de cierta indiferencia, de aparente normalidad, son actitudes y decisiones que nos configuran tal cual somos, que nos ayudan a abrir horizontes nuevos para nosotros y para todos aquellos que nos acompañan en este viaje, en una palabra somos lo que un día decidimos ser, cociente o inconscientemente…pero al fin y al cabo somos lo que hacemos, a veces. a fuerza de tropiezos y adquiriendo experiencia. La vida nos moldeo lentamente a su antojo, hasta llegar a la actualidad, ¿y a partir de ahora?... el tiempo lo dirá, solo es cuestión de esperar.

Dependencia y cuidadores

 

   
   Ahora que se habla claramente de vivir el “momento presente” de no darle vueltas al pasado, aquellos “Maravillosos años” quedaron atrás; no deberíamos de atormentarnos (por el bien de nuestra salud) en exceso, por lo que nos deparara el día de mañana, tampoco confiar en quien ha demostrado que su palabra es vana, ni en otros flautistas similares cortados por la misma tijera... Nunca la preocupación ha resuelto, por si sola, ningún problema... lo que de verdad es vital para resolverlos, es sin duda, la confianza en uno mismo, "la fe mueve montañas"..., pero si no va acompañada de acciones, por sí sola no es suficiente. No deberíamos quedarnos en casa, lamentándonos de nuestra desdicha, del cruel destino, y a la vez confiar en que otros nos saquen las castañas del fuego, en una palabra, den la cara por nosotros, o quizá dejarlo pasar… a ver si el tiempo los soluciona por si solos. A los problemas hay que abordarlos de cara y si puede ser con una decisión firme, con coraje, pero es imprescindible la colaboración de otras personas que sufren nuestro mismo destino o tal vez, estén en peores condiciones. La vida no es por sí misma problemática, sino  otros son los que la transforman en insufrible, son, por tanto, los seres humanos quienes crean los problemas y son ellos quienes deben dar la solución ...Sobrevivir nunca fue fácil y si además se tiene una dependencia o un familiar es esta situación, pues peor. La falta de sensibilidad de los políticos, su falta de compromiso, la carencia absoluta de ideas…Su única propuesta es recortar las insuficientes ayudas, no reflexionan sobre que a veces la carga que supone la dependencia es muy pesada y muy difícil para el dependiente, cuanto más para los cuidadores, ellos renuncian siempre a su propia vida, lo dejan todo para que a su familiar (padre, madre, hermanos, hijos etc.) no les falte de nada, renuncian a su vida social, a todos sus caprichos y si hace falta, incluso a comer. Con los recortes se sienten heridos y escandalizados, de que les ha servido su sacrificio, ¿que harán a partir de ahora?¿como quedan los dependientes? esta agónica situación les supera, se preguntan ¿Cómo se puede recortar en servicios? ¿y imponer el copago en medicamentos, pañales, prótesis..etc? Y ¿ todo demás? no saben como afrontar su día a día y viven con la confianza en que se cumplirá aquello, que no hace tanto tiempo se les prometió. Les preocupa su hoy y más aún el mañana, cada día es más difícil que el anterior. Hoy solo se busca vivir de manera justa y digna, según están los tiempos, con sencillez, sin lujos, pero sin carencias, que tengan al menos un mínimo de dignidad en su vida, que se acabe el abandono que sufren. Por ello. es muy importante, que no se sientan solos, que sepan que cuentan con el apoyo de la sociedad. Lo que les agota de verdad, es sentirse desolados, abandonados a su suerte, sin ninguna ayuda o desahogo, con todas esas vueltas de tuerca, que cada día les aprietan más y "esta vaca no tiene más leche..".  se pretende volver al pasado, aniquilar de un plumazo la ley de dependencia. Con la amenaza y el miedo al futuro que esas medidas conllevan, los cuidadores no encuentran la fuerza para seguir, En su mañana deberán hacer frente a situaciones más difíciles, eso esta clarisimo, pero ¿Quién les amparara? Nadie, y ¿qué será de los menores dependientes cuando queden solos? el estado tiene la obligación de atenderlos, se supone que no deben aplicar estos recortes sobre ellos; por si acaso no estaremos dispuestos a permitir que se desmantele el estado de bienestar por razones puramente ideológicas, no renunciaremos a rehacer el futuro, pero para ello debemos comenzar por el presente.

Errores y mentiras

   Los errores se pagan, no son olvidados tan fácilmente como sería lo lógico, nuestra intención puede ser poco recta por malicia, por maldad, pero más frecuentemente lo es por falta de sensatez. Nuestra  historia reciente es la historia de los errores cometidos por los dirigentes y de las mentiras que, dependiente o independientemente, les han acompañado, Viven como si hubiesen venido al mundo para amontonar riquezas y no tienen en su mente ningún otro propósito, obtener dinero, comprar, disponer, hacer, deshacer... Nos han engañado mucho y habría que ver cómo conseguir la vacuna para no volver a ser engañados, hace unos días hubo un cierto revuelo , con los papeles que hacienda entrego al juez, de un resonado caso, supuestamente había ocurrido un error al cruzar los datos de un DNI, que casualidades de la vida es su número muy poco usual, por lo visto no comprobaron estos datos, al estar este número libre de cualquier investigación…Tal vez tuviesen la certeza de estar en lo correcto, en lo apropiado, lo aconsejable, lo más eficaz y eficiente, pero lo cierto es que se han cometido errores, en concreto trece,¿Qué explicación tiene esto? Solo nos dice que es un error, pero son trece, deberíamos de despertar, ¿es este un error intencionado? O ¿es otra mentira más? nos engañan como a…, nos preocupa y a la vez nos disgusta y no encontramos ninguna explicación ante estos hechos, ¿Por qué no se habla claro? ¿Por qué no dimite el autor intelectual de los errores?, seamos sinceros con nosotros mismos, ciertamente, es impropio el hecho y por el bien de la justicia y del organismo recaudador de los impuestos, se debe aclarar los hechos, debe abrirse  una investigación que de paso a una explicación convincente, que se asuma las responsabilidades pertinentes y que dimita el o los responsables,  para dejar atrás la sospecha de injerencias en asuntos judiciales, asegurar que en el futuro no vuelva a ocurrir y tranquilizarnos a la ciudadanía, trabajar bien y colaborar con la verdad, no de forma sesgada e interesada, todo esto es propio de un buen gobernante. Pero si aquello que busca es crear confusión, lo ha logrado, olvidándose por completo de las funciones que le corresponde, Y si el sentido común se le enturbia, ¡que justicia habrá! hemos sido engañados tantas veces y suponemos que seguiremos siendo engañados, siempre aparece la pregunta sobre qué hacer para no reincidir. Pero sí sé que el entusiasmo es mal consejero, que el tener una única fuente de información es peligroso y si no se comprueban y contrastan los datos pues peor.

Con 40 años o más ¿Mayores para trabajar?

    Quedarse sin trabajo es traumático a cualquier edad, más aún, si se supera la cuarentena, pero si se tiene más de 45 ó 50 años y cargas familiares, la situación es complicada, muy dura y si además se alarga en el tiempo puede ocasionar trastornos como la pérdida de autoestima y la depresión crónica, cuando se llega a una cierta edad, se reflexiona mucho sobre cómo actuar para no quedarse en la estacada, siempre en la cola del paro, cada vez hay más ofertas que ofrecen programas formativos diseñados a la medida, contribuyendo a facilitar la reinserción en el mercado con el fin de tener alguna posibilidad laboral, para lograr rehacer su vida, indudablemente, tendrán que adquirir formación, Así lo afirma todos los agentes sociales, pero se les plantean la siguiente cuestión ¿en qué? Más aún ¿para qué les puede servir? ¿Cuáles son las salidas que les pueden ofrecer?, ¿qué sentido nuevo dará a su vida? Quienes poseen escasa formación o han sido despedidos después de muchos años de trabajo en una misma empresa están desorientados y eso les paraliza... podrían poner cada uno de ellos (los que están en paro) toda la carne en el asador, eso sí, si hay posibilidades ciertas de colocación, de lo contrario se adueña de ellos la desilusión, la falta de motivación y la desidia … sería especialmente grave y ridícula, les hace falta acciones formativas, pero que tenga una salida laboral, ya que se trata de invertir mucho tiempo y esfuerzo pues son actos de dedicación, practica y estudio, es decir, actos que son propios de la necesidad de reciclaje y no de la edad propiamente dicha, aunque nunca es tarde si la dicha es buena...y si con ellos aumentan las posibilidades de encontrar un trabajo más o menos seguro en el cada vez más menguante mercado laboral, Por tanto, no existe la posibilidad de escoger en qué se va a trabajar, pero tampoco estamos para que nos vean, sino que se trata de redirigir nuestras vidas , no importa si no nos gusta, no siendo malo, e inestable, sino todo lo contrario, pues se hace, pero lo que sí importa ¡y mucho! es que se vea el final del túnel tras esta formación Y, por tanto, en todo lo que hacen o se proponen hacer, y no solo  buscar nuestros gustos o intereses, si queremos encontrar trabajo y poner fin a esta situación de penuria y angustia, Tengo la esperanza de que llegará el momento en que las empresas valoraran el talento potencial y la contribución efectiva de los trabajadores de más edad, para ese momento debemos estar preparados.

¿Libertad o Seguridad?

 Los últimos escándalos de ciberespionaje han provocado una cuestionable polémica, ahora se nos invita a escoger, como en aquel dilema de la obra de Shakespeare, en “Hamlet” (ser o no ser), Libertad o seguridad, no es una decisión fácil, ni mucho menos…. La libertad sin seguridad no es tal, pero, ¿para qué seguridad sin libertad? para conseguir mayor seguridad y libertad hay que reducir, por una parte, la amenaza y, por otra, nuestra vulnerabilidad; lo primero se logra con medidas para combatir las "supuestas" coacciones y sus causas. Lo segundo, haciéndonos más fuertes ante ellas. El problema que plantea el necesario equilibrio entre seguridad y libertad no es nuevo ni teórico, sino que afecta de modo directo a nuestra vida diaria, es lógico que esto sea así, España nunca ha sido ni más libre, ni segura que en la actualidad, es un país que ha renacido de sus cenizas, como ave fénix, tras una cruel guerra civil seguida de una dictadura durante 40 años, con una separación entre gobierno y pueblo. Si se ha logrado el avance hacia la democracia, ha sido sobre la base de valores compartidos como la libertad,  la solidaridad, el imperio de la ley y por encima de todo “el respeto por los derechos humanos y las libertades individuales”, lo que, por cierto, implica también la no discriminación y la protección de las minorías amenazadas por la creciente crisis económica y la reducción del gasto socio-sanitario... Es, por tanto, una decisión drástica, porque se ha de seguir luchando día a día, está demostrado que “camarón que se duerme, la corriente se lo lleva…” ósea que si consentimos el desequilibrio, el “status quo” que se ha impuesto después de  tantos años de lucha, habrá sido inútil, “para ese viaje, no necesitamos echar las alforjas…” nos hubiésemos ahorrado tanto sufrimiento y dolor que se causó en nombre de la libertad, ¿Cómo podemos elegir sin miedo al equívoco?  No se puede renunciar ni a una, ni a otra…los dos derechos están unidos entre sí; hoy es muy fácil disponer de información personal y confidencial de cualquiera, no hay que esforzarse, nosotros mismos la facilitamos, con nuestros comentarios, información de nuestra vida, agenda, fotos, algunas muy íntimas…; pues toda esta información es recopilada y analizada, sin ninguna garantía jurídica, como si estuviéramos cometiendo algún delito… no se garantiza nuestro derecho a la intimidad, al honor, a la presunción de inocencia…sino que más bien se utiliza en contra nuestra y para lograr objetivos de más que dudosa legalidad… pues ante este dilema, yo escogeré, la opción más razonable “libertad con justicia y sobre todo con seguridad” es el propio país, según nuestra constitución, quien me lo debe garantizar.

¿Venganza?

   Si algo estamos aprendiendo es que el odio va “in crescendo” con las injusticias sociales, de seguir así, más pronto que tarde exigiremos nuestro “derecho” a la venganza, eso sí, en una justa proporción; deseamos hacer al “malhechor” lo que él nos ha hecho a nosotros, de lo contrario se cometería una injusticia (a nuestro modesto entender); esto seria lo que pasaría con el "ojo por ojo, diente por diente..." Aun así, sería una reclamación muy limitada... Tenemos la necesidad de superar la venganza, desterrarla de nuestra vida, pero para ello debe de haber justicia social, se debe reparar el daño causado (si es posible) en su justa medida, No obstante, la reparación de este daño, debe acompañarse con el arrepentimiento del malhechor, no nos debemos conformar con una simple lamentación, tan sólo porque se nos vea indefensos o acomplejados, se le debe aplicar una medida correctiva que sea proporcional al daño infligido . A menudo se confunde la petición legitima de reparo, con la idea de la renuncia a nuestros derechos legales de defensa, y, no es eso… Pedir amparo y reparación del mal que se nos ha causado, quiere decir denunciar a quien lo ha hecho, exigirle su responsabilidad en los hechos, lo hacemos como un gesto pacífico, pero firme, con serenidad, sin prisas; sabemos pues, cuál debe ser nuestra actitud, no buscar revancha, ni conflicto, pero sí exigir justicia; estar abierto a la decisión de esta y aceptar su deliberaciones; ciertamente no es cosa fácil, pero es el único modo que disponemos de frenarlo con contundencia e intentar hacer un mundo donde poder vivir en paz. Podemos aceptar con mayor agrado  o no el veredicto, al malhechor lo llamarán culpable, no presunto, y en consecuencia será castigado como la ley prevea, pero a nosotros nos llenara la justicia y la satisfacción del deber cumplido. Él puede que un día se arrepienta de las acciones que ejerció contra nosotros, pero seremos paradogícamente, nosotros, los que dormiremos tranquilos y en paz, una vez se haya restablecido la ley, por haber hecho lo necesario y estado en el lugar que la historia nos pidió.

Pagar impuestos

   Ahora se nos explica que las condiciones son muy duras y se nos pide acondicionarnos a esta “nueva” situación, ¿se puede hacer?… pero no con indiferencia. ¿Por qué no se invita a compartir sus bienes y recursos a los poderosos? si tan solo pagaran todos sus impuestos... ¿Por qué solo se pide sacrificio a los mismos (pobres)? Es difícil contestar sin caer en una descortesía, en palabras mal sonantes y rudas; descuidan atender a las personas en sus necesidades básicas, cada vez son más, carecen del mínimo respeto, no se conmueven por nada, ¿estamos acostumbrados a esto?... Se dibuja un agudo contraste entre el poderoso arrogante y las clases humildes, los poderosos no siguen las reglas y por tanto, carecen de la suficiente sensibilidad para aplicar las más elemental acción, como es la redistribución de la riqueza, compartirla con sus conciudadanos, que estén en peores condiciones; en cambio, las clases medias-bajas son las auténticas víctimas de esta situación, ellos no pueden defraudar, no tienen ocasión, están cogidos, no hay duda que ellos entienden la importancia de esa contribución, aunque les sea dolosa, saben perfectamente que es necesaria para el funcionamiento del país y la aceptan, esta aceptación no es correspondida, en proporción o cuantía, Los poderosos, carecen totalmente de esta sensibilidad y hacen caer el peso de la crisis sobre los más débiles, haciéndoles cada vez más pobres, a la vez, debido al incremento del gasto, se les aumentan los impuestos, Los ricos disponen de sus propios paraísos fiscales, donde tienen a buen recaudo sus bienes, lejos del control de hacienda y sirviendo únicamente a sus intereses, evitan la carga fiscal que les correspondería por ley y, al hacerlo, no contribuyen con las aportaciones que el país necesita para que poder salir, con cierto éxito, de esta penosa situación y así facilitar el equilibrio financiero y por añadido la integridad e independencia. Como humanos, que somos, es muy difícil aceptar este fraude y perdonar el dinero, que tan alegremente se ha defraudado, a las personas no nos preocupa sus apariencias y posición, a ellos sí;  para lucir una reputación de vida ejemplar, mientras continúan evitando, en la medida de sus posibilidades, su contribución para con el país; con sociedades, que únicamente tienen como objetivo, la ocultación de bienes y por tanto, evitar pagar impuestos, Si ahora quisiésemos describir lo que se siente ante estos hechos, podríamos decir: desilusión, impotencia e indefensión, se ve claramente que hay ciudadanos de primera y de segunda, y, lo peor es que hay ciudadanos que no juegan ninguna liga, están fuera de juego y no cuentan para nada, ciertamente viven aquí, pero, como si no... En nuestro ánimo no dudamos en criticar negativamente a los que deberían de hacer mayor esfuerzo, dando ejemplo y no lo hacen, no observan las reglas del juego, pero toda esa cuidadosa estrategia fiscal carece de valor moral, aunque se auto proclamen patriotas, que aman profundamente este país, la maleficencia de sus actos y omisiones (fiscales), les desmienten y demuestran que solo aman a un señor: "Don Dinero".

Sabiduría del mayor

  
   Las personas suelen tenerse un gran respeto entres si, o al menos hasta hace poco era así, sobre todo a las personas mayores, una veneración por la edad, sinónimo de sabiduría, ya lo dice el refrán "mas sabe el diablo por viejo que por diablo..." porque hemos de admitir que ante situaciones peliagudas, como la presente, podrían hacer sus aportaciones… por aquello de la experiencia, este respeto a las personas mayores les otorga cierta posición social, honor e interés por sus pensamientos y palabras, basadas seguramente, en sus vivencias pasadas que guardan un alto grado de similitud con la actual, por esto, teniendo presente que no hay dos crisis iguales, y esta es peor que cualquier otra vivida con anterioridad; se les debe dar una oportunidad, pero son necesarias unas condiciones graves, o muy serias… como son las necesidades actuales, y que lo que se proponga sea justo y bueno. Pero no podemos exigirles todavía más, es decir, no se les puede pedir un sacrificio superior a sus posibilidades, ni responsabilidades que les cargue sus, ya, decrépitos hombros, sus consejos son importantes, pero tampoco infalibles, nos aportan como se salió, como se vivió en ocasiones pasadas, como se organizó la ayuda, como se redistribuyo el trabajo y la comida, sus palabras y obras pueden ayudarnos en encontrar una solución viable, y de verdad… ¿tiene esto arreglo? es la gran pregunta, que ya hemos formulado en multitud de ocasiones, y a la que tantos economistas en los últimos tiempos han procurado dar respuesta. ¿Quién tiene la solución? Los expertos nos dicen una cosa y la contraria y ni una, ni otra funcionan…. Entre otras cuestiones porque no les interesa a los poderosos que así sea, pues con esa situación de crisis permanente nos tienen a su merced, y con los políticos como lacayos… pues esto es Jauja…La razón de que tan pocos políticos obren con la única y exclusiva intención de complacer al pueblo y anteponerlo por encima de todo cualquier otro motivo o circunstancia, es porque la mayor parte de ellos se encuentran sometidos a la más espantosa ignorancia y servidumbre, ellos viven desahogadamente e ignoran o cierran los ojos ante el desamparo generalizado ¡cuántos sufrimientos innecesarios se podían haber evitado…! Solo hay que escuchar a los más veteranos (los mayores), actualizar sus propuestas e intentarlo, total una vez caídos en el fango…. Que más da caer en el río, la Senectud no es sinónimo de inutilidad  todavía nos pueden aportar mucho, Hay que pensar en ello.

Hambre infantil

    Continuando con las reflexiones y  profundizando en las necesidades básicas que cualquier persona, solo por existir, tiene, ¿Qué pasa con nuestros niños y niñas?, observándoles, así de pronto, se me ocurre que se le está robando su infancia, deberíamos de procurarles unas condiciones mínimas para su vida diaria, vida afectiva, vida social y familiar, pero nosotros, estamos preocupados de otros asuntos "más importantes" crisis, paro...etc, buscamos el modo de sobrevivir, aunque sea con los mínimos recursos, tirar para adelante como mejor se pueda, que a veces es por la caridad de otros (familia, ong´s). ¡los niños no nos piden tanto...! pero nos dan lo máximo que pueden dar, su cariño. Hoy, se apunta a las muchas necesidades que tienen, una nueva, impensable hace poco, están llegando a límites insoportables, como es la desnutrición, el hambre… hay hogares que ya no pueden garantizar ni una sola comida al día para sus hijos, ¡que desesperación para esos padres!, no quiero ni pensarlo…, la pureza de pensamiento de nuestros niños, su ingenuidad, les lleva a pensar que esta situación atípica es lo normal, es un lenguaje humano de autodefensa, ellos ven el amor y la lucha de sus padres, pero a la vez se dan cuenta de la impotencia de estos, la situación les supera, la pobreza la perciben con toda nitidez, con toda la crueldad y la maleficencia de la sociedad, a veces tan insensible y consentidora, por tanto, no se puede banalizar la situación de desamparo de las familias, como tampoco podemos convertir a los niños en sufridores de situaciones que para nada tienen culpa alguna, ¡ni siquiera con el pensamiento!, aún están desarrollando su personalidad, es preciso, pues, cortar el mal de raíz y evitar estas situaciones, este desamparo que nos llevan a la penuria actual; que pueden parecernos radicales y exageradas, pero ciertas como la vida misma. Finalmente, la dignidad de los padres e hijos  debe ser protegida siempre, pues forma parte del proyecto social de nuestro futuro inmediato,, y al mismo tiempo es signo de solidaridad, no se puede vivir indiferente, si el hambre y las necesidades básicas de la infancia no nos conmueve… nada lo hará, nuestro corazón será como negro carbón y por tanto, habrá perdido la poca o mucha humanidad, si alguna vez la tuvo.

Amistad

 

   ¿Qué es la amistad? la amistad es un tipo de unión espiritual, afectiva.. que se basa en el apoyo mutuo, la comprensión, el cariño, la comunicación  y la absoluta confianza ciega entre dos o más personas, por tanto anima el alma y estimula todos nuestros sentidos, entre otras cualidades es beneficiosa para la salud, pues activa áreas del cerebro y favorece el bienestar, es un reflejo fiel de nuestra interioridad, un factor de integración social, nos hace crecer y madurar, ayudando a forjar nuestra personalidad y la de aquellos con quienes nos relacionamos, la  colaboración, el intercambio de ideas, el hecho de ocupar un lugar en el grupo o pandilla, cierra el paso a la agresividad, a la desconfianza o la sensación de amenaza, el apoyo emocional que conlleva y el hecho de tener alguien con quien compartir nuestras inquietudes y secretos, y si es preciso, alguien que nos regañe, que nos haga ver el error de algunas actitudes. Tener amigos nos sirve, de alguna manera, de refugio donde, en caso de necesidad, podemos encontrar ayuda y consuelo sin tener que dar nada a cambio, la amistad no es posesión, ni debe tener exigencias, ni obligaciones… sino libertad y apoyo mutuo. A lo largo de la vida vamos estableciendo numerosas amistades en las que volcamos nuestro afecto, de una forma más o menos intensa, esperando que, tal vez, esta persona también nos dé ese mismo cariño a nosotros, pero las verdaderas amistades, como se suele decir, se cuentan con los dedos de una mano… e incluso sobran dedos, debemos diferenciar lo que es un simple conocido sin más.. a una verdadera amistad, de igual manera diferenciar entre una amistad  y una persona que ejerce sobre nosotros una atracción física, hay fronteras, que si se quiere que la amistad perdure, no se debe cruzar, pero efectuadas las oportunas aclaraciones es bueno disponer de verdaderos amigos, entre multitud de factores, nunca tendrás la impresión de estar solo, por muchos kilómetros que te separe, siempre estará ahí, a un toque de teléfono y estara disponible para escucharte y apoyarte las 24 horas del día.

Paciencia

   No se debe de caer en la  tentación de ir más allá de lo que procede o marca la ley, para la investigación y posterior encausamiento de las personas supuestamente corruptas, sin caer en prevaricación, o en acciones de mala fe, que pueda llevar consigo la anulación de la (posible) causa en un futuro, muchas veces  prima más el deseo de rapidez, de venganza, de envidia, de hacer leña del árbol caído… que desvanece el deseo de que resplandezca la verdad, amoldándose a las conveniencias del momento y nada más, hay que buscar las pruebas con una actitud distinta, imparcial, para llegar a encontrar las pruebas sustanciosas, mayores, lógicamente se ha de pasar por los indicios menores, pues  las acciones más pequeñas suelen ser donde se encuentra las claves y quizá, la explicaciones que buscamos; por lo tanto hay que tener paciencia, la justicia es lenta, pero si la situación, en esta búsqueda se tuerce, no se debe tener actitudes negativas (cólera, menosprecio) ni renegar de quien está buscando esclarecer la verdad, no son las actitudes adecuadas para el asunto, hay que efectuar una interpretación positiva del caso  y exigirnos un poco o bastante paciencia, tener una actitud de espera, Todo esto, sólo puede tener un final , por tanto, a  la ley en su plenitud le debemos pedir firmeza, hasta el mínimo detalle, aunque también se debe colaborar con ella, principalmente no poniéndole zancadillas que nos lleven a la interpretación de que se está ocultando algo gordo, es por tanto vital y necesaria la colaboración de todas las administraciones, hay demasiado en juego para que no sea así, que el futuro se escriba de una forma u otra… depende de ello.

Mirada al pasado

   A menudo creemos que refugiándonos en el pasado, como si este hubiese sido un tiempo mejor, si este volviera, pensamos, estaríamos en unas condiciones óptimas, mejor protegidos de estos avatares, sin responsabilidades sobre nuestros hombros, pero, debemos de conocerlo bien, antes de efectuar dicha afirmación, se dice “el pueblo que olvida su pasado está condenado a repetirlo” y “agua pasada no mueve molino”, no es que se reniegue de él, ni tampoco apoye lo sucedido en los tiempos pretéritos, pero no se puede cambiar, para que torturarnos con ideas que no van a aportar nada nuevo, bueno, absurdos enfrentamientos entre unos y otros, y la eterna pregunta ¿Qué hubiese sucedido si…?, a estas alturas debería de estar superadas esas y otras cuestiones, lo que verdaderamente importa es el hoy, y el mañana, deberíamos de estar unidos todos en una sola cosa “la salida de la crisis” y no de cualquier forma, no a cualquier precio, sino con fuerza y sobre todo unidad… por el beneficio común y evitando, por tanto, dejar cadáveres en el camino, o salimos todos o permaneceremos así por años, al pueblo nos conviene la reflexión frecuente, diaria,  sosegada, imparcial si esto fuera posible, pero carecemos de tiempo paradójicamente, tenemos la sensación de abandono, de falta de liderazgo, que nadie viene a nosotros para darnos solución a nada, que nuestra desdicha no tiene arreglo, ¿esperamos , quizá, una solución rápida? No, pero por lo menos que nos enseñen el camino, que se vea que existe un final para esto y que ese final nos convenza, es por tanto muy importante la claridad de ideas, la luz sobre el futuro, hoy por hoy no disponemos de una buena explicación, ni mala tan siquiera, guardar las apariencias no garantiza que estemos mejor, eso es sólo una mentira, una más de tantas, en la cual nosotros mismos nos engañamos y  no dejamos que los demás aprecien nuestra verdadera situación de penuria, no hay maldad en esta actitud, ni es motivo de escándalo, pero para nada nos beneficia, de cara a una posible ayuda, seguramente nos la pedirán a nosotros… por creernos lo que no somos… ni nunca fuimos.

Corrupción

   ¿Se debe de poner los medios necesarios para evitar la corrupción?, “del escarmentao nace el avisao”, dicen en mi tierra, en nuestro tiempo, muchos han perdido la fe y la esperanza en el sistema y dicen que no vale la pena seguir, que es una la lucha contra molinos de viento, que está llena de disgustos, muchas dificultades y penosos sufrimientos, que se pasa muy mal, que trae consigo la desgracia, no solo a ellos, sino al conjunto de su familia, que tiene como única perspectiva final, la claudicación ante elementos extrañamente superiores y los poderes ocultos o facticos. Pero, existen Quijotes que constantemente luchan contra esos molinos, sabiendo de ante mano el desequilibrio de fuerzas que hay sobre el tablero,  saben que todo en esta vida es un camino hacia la meta final, que este, está lleno de obstáculos, muchos de ellos inexistentes, que solo habitan en nuestra mente; que dificultades, sufrimientos y dolores nos ayudan a ser más fuertes en esta singular lucha; y que al final, si no ganamos, al menos,  habrá servido para hacerles saber que aún hay “héroes” que no se dejan avasallar fácilmente, que quieren alejar el fantasma (muy real) de la corrupción, no pretenden, ni quieren que haya injusticia, violencia, abusos hacia los débiles... Todo lo contrario, ha de resplandecer el imperio de la ley, sin trampas, con toda su fuerza, es pues, la preocupación por los otros, la solidaridad, la generosidad...sin límites, lo que les mueve e inquieta, Y, así, ellos se transforman con el ejemplo de su lucha titánica,  mostrándonos el camino de la auténtica lucha... Allá donde antes sólo había corrupción, dudas e incertidumbres germina una semilla que hace nacer la creencia de todos en la justa igualdad, puede que se pierda esta batalla (habrá más sin duda).. pero no será en vano, la corrupción tendrá los días contados, y al final pagaran por sus corruptelas, aquellos que, inapropiadamente, se han adueñado de lo que no es suyo, a sabiendas que entre todos debemos de pagarlo.

El Honor

   La publicación del informe sobre las pensiones, viene a cuento, pues nuestra actitud nos hace temer que a menudo somos unos ingenuos y actuamos como si nada fuese con nosotros,, pues en este juego vamos a perder todos. Se afanan en proclamar el tan ansiado fin de la crisis, o al menos el comienzo de la recuperación “buenas noticias” que nos han comunicado como suele decirse “a diestro y siniestro… el año que viene estaremos mejor…. ¿de verdad?, yo solo me pregunto ¿estaremos? Lo de mejor, lo dudo, pero, ¡ojala, sea eso tan solo una duda! necesitamos escuchar palabras de ánimo que vengan acompañadas de gestos de estímulo y no de largos silencios u ocultaciones tras un plasma; lo que nos prometen parece como si se diluyera en el tiempo, damos como hecho, que las promesas son solo eso y no tienen ningún valor… ni moral, ni de compromiso y eso no lo justifica, la palabra esta para cumplirse. Recordáis alguien ¿que nos dijeron hace un tiempo? Seguro que no, o no completamente, por eso debemos exigir el cumplimiento de la palabra dada, como si fueran unos principios fundamentales para que no se olviden nunca de ella, o al menos, tengan el coraje de no darla si no la van a cumplir, las promesas son unos puntos básicos que nos ayudan a decidir nuestro futuro inmediato,  el compromiso o promesa está destinados a todos, no sólo comprometen a una parte (quien promete) sino a todos los que le rodean y acompañan en su viaje, ni excluye a ninguna clase de personas (aunque no le voten) sino que representa un compromiso universal (en caso de salir elegido), aunque la promesa no sea de obligado cumplimiento, debemos de exigirlo; debemos, por tanto, cambiar de mentalidad y transformar nuestra valoración de las promesas, acostumbrarnos a que sean cumplidas, como si de un contrato se tratase, al fin y al cabo eso es… lamentarnos de su olvido no sirve para nada, hay que tener presente los hechos, se ve que en ellos esta las ansias de gobernar, porque han tomado una “determinada opción”, para ser ellos, los que reconduzcan y manejen nuestros numerosos problemas, son, por tanto, los encargados de tomar las decisiones por nosotros, también en tu nombre y en el mío, si nos invitaron a la alegría, a la esperanza, a la confianza ciega en la solución de nuestros problemas, no, a la confusión dialéctica, cuando las cosas se ponen mal, deben comunicarlo, Y es que, cuando la coherencia de la palabra dada sea firme, entonces, entre las dificultades y contrariedades inesperadas, se debe priorizar su cumplimiento, si es que son gente de honor (si aún vale el honor)

Puentes de unión

   Hoy más que nunca quisiéramos enjugar todas nuestras lágrimas, los medios de comunicación nos muestran el dolor que esta crisis está causando, ¡Son tantos! si pudiéramos socorrer a tantos hombres y mujeres pero…, no podemos, nos sale del alma decir que nos vemos desbordados por tanto dolor, tanto sufrimiento. ¡Ayúdanos! nos dicen ¿Cómo? Respondo, si apenas tengo lo justo para subsistir, lo justo para seguir un poco tiempo más, no mucho…  pero, ante esta sensación de impotencia, debemos reaccionar con esfuerzo sobredimensionado y con sentido común, Sentido sobredimensionado, en primer lugar, para ponernos inmediatamente en manos de nuestros congéneres y decirles que no están solos, la impotencia es nuestra, no de ellos, la peor de todas las tragedias es la moderna pretensión de edificar un mundo inhumano sin valores e, incluso, inhabitable, desde luego es posible realizar “algo”, pero la experiencia nos muestra que este “algo” es frecuentemente utópico e irrealizable sin el apoyo de todos, somos todos necesarios para edificar este mundo nuevo y justo. Debemos repetirnos y convencernos “Sin mí no podéis hacer nada”. En segundo lugar, aplicar el sentido común, sabemos que el dolor causado no lo podemos eliminar… todas las “revoluciones” nos han garantizado un oasis en este desierto que es la vida pero han acabado en corrupción y más desamparo para todos. Y, aun en el hipotético caso, de que algún día se pudiera establecer la justicia social, no cesarían nuestras necesidades, hay que ser “realista” y, a la vez, confiar en un futuro esperanzador, podemos y debemos cambiar ese oscuro destino, los tiempos que vendrán deben ser una oportunidad para implementar esa justicia tan invocada, hemos recorrido un durísimo camino, ahora debemos ser solidarios del que peor lo pasa, son actitudes que dan apoyo y reconocimiento al que sufre, sin culpa alguna, las heridas que ha causado la crisis a los demás, nos deben servir de ejemplo para las propias, no es compasión es el  puente que levantamos y que nos acerca a la realidad social de nuestro entorno, el hambre y la pobreza que habitan con nosotros en estos duros e inexplicables tiempos de crisis.

Pensionazo

   Hoy me viene a la memoria todas las personas que de una forma o de otra nos veremos seriamente afectados por la “reforma” (recortes) del sistema de pensiones, queda abierta la veda para el gobernante de turno (voto cautivo), las pensiones son muy importantes para un buen sector de la población (mayores, viudas/os personas con discapacidad, dependientes..) esta reforma afecta gravemente a lo más profundo de la persona, su propia subsistencia, de donde emanan todos sus necesidades, ¿Cómo se vende esto?  ¿Por Fe en que están haciendo lo correcto?¿para quién? nuestros mayores nos muestran siempre su disponibilidad, espíritu de servicio, fortaleza, humildad, sencillez… y toda una estela inacabable de virtudes. Entonces, ¿Por qué? La respuesta la encontramos, como no, en la deuda y el déficit con en el rescate a la banca, en cabeza, y su necesaria recapitalización, con un futuro tan incierto…, pues ahora, quienes puedan, contrataran un plan de jubilación, plan por supuesto privado, que dará a los bancos unos depósitos que le son tan necesarios…los pensamientos, palabras y obras de quien tiene el poder decidir, tienen como origen y como fin agradar a la troika. Hoy nos dan una buena muestra de ello, después de engatusarnos con la escena del caos absoluto y la insolvencia futura del sistema, ¿Qué secreto se guardan? Las familias estamos pasando por horas amargas, duras, son tantas y tantas las necesidades a cubrir, los pensionistas están hoy por hoy cubriéndolas, privándose de su supuesta tranquilidad económica en pro de sus hijos y nietos… ver cómo su familia se viene abajo moralmente, el dolor se les vuelve desesperanza en el triunfo de esta sin razón ... y ahora no solo se les baja (no actualizando el IPC) sino que se nos infunde un terror de no saber si se podrá cubrir un mínimo, vuelvo a sentir Vergüenza Ajena, claro, ellos con dos o tres pensiones... y solo siete años de cotización para recibir el 100% de pensión y de la más alta, pues lo tienen más claro.

Donante de órganos

   Durante estos días celebramos la semana del donante de órganos, desde hace tiempo, el hombre sitúa “físicamente” en el corazón lo mejor o lo peor del ser humano…, con las cicatrices que la vida le va marcando, con fuego y un cierto vitalismo, como símbolo de nuestro transcurrir por ella,  y desde este corazón que vivifica y renueva nuestra historia pasada, presente y futura, desde donde contemplamos y podemos comprender la alegría de aquel que encuentra la vida que daba por perdida.
   Cuando escuchamos el diagnostico de una enfermedad que está abocada a hacernos depender de una “maquina” o en el peor caso a la muerte… miramos a nuestro alrededor, buscamos que nos den una solución… la que sea, no nos podemos creer que este pasándonos esto, ¿Por qué a mí? ¿Qué mal he hecho? ¿merezco tal castigo?, tendemos siempre a la depresión, buscamos ayuda.. con la esperanza de que exista una solución, al menos una, que nos dé aunque sea un poco más de tiempo, no es justo nos repetimos y nos colocamos un poco “distantes” cómo salvando las distancias, como si ya nos hubiéramos ido, ¡Pues no!, la alegría de nuestra esperanza tiene un nombre y un rostro, que permanecerá en el anonimato para nosotros “El Donante de Órganos”, todos podemos serlo o necesitarlo,  así que..., el altruismo de un ser… el final de su vida no significa el final para todo, aun puede hacer la acción más noble que engrandecerá aun más su muerte, su partida, regalar vida, donar tiempo a quien ya se le acaba… en que el concepto “regalar” no se relativiza y gana la importancia que merece, es un acto considerado por algunos familiares como muy duro, triste.. Se trata de la muerte de un ser querido, pero debemos de pensar la alegría que para el donante supondría ver cumplida una de sus últimas voluntades, casi siempre se hace así, la vida que se dona es como una corriente de luz que atraviesa todo el mundo. Hay que recordarles, constantemente... como acto de eterna gratitud; a menudo me preguntan si creo en la vida tras la muerte, con personas como los donantes, que en su último acto en la tierra, dan vida, la respuesta es SI.

Dudas? legales

   Un erudito de la Ley se preguntara ¿Cuál es la verdadera función de esta? ¿A quién o qué debe proteger? la pregunta es capciosa, porque intenta establecer una prioridad en los objetivos de esta, después, porque la pregunta no define cuál es el elemento a proteger: el poderoso o la justicia, la respuesta (por lógica) es un poco peliaguda, toda la actitud del erudito queda resumida en un punto: la veracidad o no de “las pruebas de cargo”, el comportamiento del sistema queda definido en la relación  con el demandado y con los “sedientos de justicia” (demandantes), pero hay que tener en cuenta el comportamiento humano bajo “supuesta presión” es desconcertante e imprevisible, su actitud es consecuencia del enfrentamiento entre el deber y la presión a que se ve sometido. ¿Qué primara más? porque no se entiende posiciones de algunos fiscales, que más bien parecen defensores, que responsables de la investigación y que con esta se esclarezca la verdad, y si es el juez quien con sus atribuciones y sin indicios racionales ,abusa de su posición (prevarica) y manda a la cárcel a quien no debe … que el propio fiscal le acuse de prevaricación… sino no se entiende estas posiciones que últimamente están teniendo Jueces y fiscales… unos u otros están actuando mal… a sabiendas…, esto tan solo tiene una lectura en la medida en que sean verdaderas o no las pruebas o indicios. No quiero pensar que a veces  se utiliza la ley como venganza,  como una piedra que se lanza para subsanar reyertas políticas o personales, la pregunta del erudito de la Ley está latente, tiene fácil respuesta pero nadie que tenga dos dedos de frente dará la solución (por miedo a las represalias)

Ciberespionaje "Troyanos legales"

   Creí que ya lo había visto todo o casi, la realidad hace bueno aquello de no te acostaras sin saber una cosa más… la ocurrencia atribuida al Sr. ministro de “Justicia “de utilizar troyanos para investigar, ve tú a saber que, es, aparte de inconstitucional, inmoral, asquerosa… estamos por preservar la intimidad y la vida privada y, si sale adelante, estaremos en manos de alguien, sin saber sus propósitos verdaderos, En efecto, mediante una excusa hipotética rebuscada, nos presentan una dificultad añadida, en la cual ellos no creen, nos dicen que es por la seguridad ¿de quién? buscan, así, poner en entredicho la libertad individual, anularla, si se puede.. seremos un espía que paradójicamente informara (sin saberlo) de todas nuestras actividades, de nuestros contactos, de nuestros comentarios… habrá tal dificultad de tener vida propia, y, cuando lo estimen necesario, se  aprovecharan de las circunstancias, para tenernos controlados; yo les reprocharía lo equivocados que están, porque no entienden ni les interesa la verdad, si hay alguien que deba de ser intervenido (espiado) existen suficientes mecanismos, bajo la supervisión de un juez, para hacerlo, no hay que poner  límites ni estrecheces (solo la que marca la propia ley), y que comiencen por ellos mismos, en vez de preocuparse de inmunizarse con tontas leyes de auto protección, yo  lejos de apoyar esta cuestión, me adhiero con toda la mente y el corazón a que esto no saldrá adelante, porque si no quedaremos frustrados en nuestra condición personal, no porque tenga nada que ocultar sino porque nada les importa a ellos lo que yo haga o decida, sabrán si vivo solo o acompañado, con quien me relaciono, que digo, que hago, que como… hasta cuando me acuesto y cuando me levanto, demasiado control…. Ante esta afrenta, no nos queda más remedio que pedir amparo, a esa misma justicia, que dicen proteger, fomentar nuestras ansias de libertad, de potenciar nuestra personalidad, el deseo de tener una vida anónima, sin sustos, siempre bajo el imperio y amparo de la ley.

Justicia ciega o sesgada?

  Nuevamente nos maravillamos del ingenio, sabiduría y pericia de algunos, con sus magistrales maniobras legales, que ponen en serio aprieto la  autonomía de algunas instituciones, pero no es solo eso, es algo más, que sacar a algunos de apuros para con la justicia y sobre todo para con la sociedad; es una cuestión que tiene en la actualidad ocupados muchos medios y personas que deberían estar en otros menesteres. ¿Qué está sucediendo?; ¿Cuándo dejamos de creer en la justicia? ¿Hasta dónde podemos tolerar?  En efecto tenemos que exigir, forzosamente, la igualdad de todos ante la ley, que lleva impresa la presunción de inocencia (mientras no se demuestre lo contrario); pero sucede que ya no se cree en tal cosa, porque está latente  en nosotros otras realidades y no la de plena igualdad, a lo largo de la vida, nos hemos planteado constantemente la cuestión de la justicia o de la ausencia de ella, en todo caso, según sea tu cuna, te afectara más o menos o nada… Somos nosotros los que estamos llamados a pedirla, y el estado a ofrecerla y garantizarla, las opciones son claras: vivir desde los valores de la justicia e igualdad, o vivir al margen  de los valores éticos socialmente reconocidos. No hay elección o duda, Siempre es tiempo de poder exigir la igualdad,  es tiempo de comparación, es tiempo para volver a “resituar” nuestra fe en la justicia, El que defiende estos valores, se convierte en un paladín, en un héroe moderno, que se trasforma en un modelo a imitar ¡Sepamos, por tanto, lo que nos conviene! y actuemos en concordancia, sin privilegios para nadie…por muy alta que sea o fuese su cuna y linaje.

Actitudes

  Para acabar con las actitudes negativas que influyen de una manera exagerada en nuestras vidas, primero, debemos implementar nuestra implicación  personal en la búsqueda de ideas innovadoras; luego, trabajar en pro de una constante fluidez e intercambio de ellas, ser positivos para contagiar nuestro entusiasmo y nuestra actitud,  que dicha actitud, anime a todos  a acercarse cada día más al final del pesimismo, de la depresión; intentar dar un vuelco a nuestro entorno, nuestro pequeño mundo… hacer de él, un lugar mejor para vivir, intentar corregir aquello que constantemente falla, la falta de credibilidad, de honorabilidad, si se quiere… trabajando con nuestra aportación personal, para un mejor entendimiento en nuestras relaciones sociales y desarrollar nuestro deber hacia el bien común ,¿Qué podemos aportar? ¿Trabajo duro (que no esclavitud), o indignación con los problemas sobrevenidos? Podemos oponernos a los que tienen la obligación de sacarnos de esta depresión, por su actitud pasiva, obligación también, a facilitar igualdad de oportunidades, podemos poner objeciones a las razones que nos dan, para justificarse, y quizás, colaborar con aquel amigo que está tratando de ayudarnos, no deseo volverme agresivo con mi crítica y comentarios, pero ¿es la solución? Deberíamos comenzar por evaluarnos a nosotros mismos, sobre los motivos reales de tanto pesimismo, quizás necesitamos un conocimiento más profundo de nuestras habilidades, de nuestra preparación y formación; quizás debemos aprender a conocernos mejor, a efectuar un mejor examen de nuestras perspectivas reales, para poder descubrir las razones por las que no podemos avanzar,  pidamos ayuda para que podamos trabajar todos, nosotros podríamos tener la solución, la de nuestros amigos, o la de nuestro entorno, si tan sólo nos dieran una oportunidad a todos.

Mentiras

¿Se puede mantener una mentira en el tiempo? La respuesta lógica seria de que no, pero con absoluta rotundidad, pero debemos de recordar que la historia la escriben los vencedores, ósea, los poderosos, ellos dominan a su antojo los medios de comunicación, lanzan mensajes agresivos, ofensivos, difamatorios.. los lanzan en diferentes frentes, para que no dé lugar el debate, son tantas cosas… que es imposible dedicarles siquiera un mínimo tiempo de reflexión, mientras ellos con absoluta desfachatez imponen sus normas, les da prácticamente igual pasar por encima de leyes, constituciones, instituciones o personas… este es su cortijo particular, o se hace lo que disponen por las buenas o se hace por las malas… pero se hace. Esto cada vez me recuerda a una partida de ajedrez, con una estrategia bien definida, lo que ocurre es que el adversario (nosotros) está fuera de juego, le coge con lo puesto y los peones contrarios bien situados, nuestro rey tocado y gravemente amenazado, estamos en jaque, difícilmente podemos reaccionar… entre otras cosas porque no sabemos jugar y por tanto condenados a perder. Por ello si, se mantiene la mentira, tanto es así, que hay “mentirosos compulsivos” que solo tienen como única misión acallar la verdad y la voz de quien la expresa y meter dudas con datos, más que engañosos y difícil de contrastar… haciendo bueno nuestro refrán “No creas nada de lo te digan y de lo que veas la mitad”